El Parque Científico de Alicante es uno de los centros de trabajo de Laminar Pharma, una compañía biofarmacéutica pionera que centra su trabajo en desarrollo de medicamentos de nueva generación. Aunque la empresa surgió como una spin-off académica de la Universidad de las Islas Baleares, lleva vinculada al PCA desde hace años y, de hecho, recientemente celebró un evento en sus instalaciones, el Laminar Pharma Investor’s Day, que reunió a su equipo ejecutivo para explicar la situación actual de la compañía y de su proyecto LAM 561.
Alicante, según explican desde la empresa, es una zona importante para el proyecto puesto que reside un grupo de inversores que fueron los mayores aportadores en la anterior ronda de capital. En esta ocasión, el evento celebrado en el Parque Científico de Alicante contó con la participación de más de 100 personas. Aprovechamos para hablar con su CEO, Pablo Escrivá para que nos cuente sus últimas novedades.
Pregunta: ¿A qué se dedica Laminar Pharma?
Pablo Escrivá: Somos una empresa que hace diseño racional de medicamentos en base a una tecnología novedosa que hemos descubierto nosotros y que estamos desarrollando para producir medicinas que sean capaces de tratar enfermedades raras, que no tienen soluciones terapéuticas plausibles, enfermedades pediátricas, y todo ello sin añadir efectos adversos.
Es una tecnología muy novedosa que nos permite hacer medicamentos que son investigados durante muchos años y, en la actualidad, nuestro primer producto está a punto de llegar al mercado. Este proyecto ha costado casi dos décadas en desarrollarlo y todos los inversores que nos han apoyado durante estos años van a conseguir tener ese retorno en cuanto empiece a venderse.
P: ¿Cómo nace la empresa?
Pablo Escrivá: La empresa surge del conocimiento científico: se descubre algo importante, se patenta y a partir de ahí empezamos el desarrollo, es decir, transformar ese conocimiento en un producto que cubra unas necesidades, en este caso, de pacientes con grandes necesidades clínicas, y por otro lado que satisfaga los intereses de inversores que quieren obtener una rentabilidad. En el momento en el que la ciencia puede convertirse en algo de utilidad humana es cuando empieza la empresa a funcionar.
P: ¿Por qué se vinculan al Parque Científico de Alicante?
Pablo Escrivá: Nos vinculamos al Parque Científico de Alicante porque había una relación personal y de la empresa con la Universidad de Alicante. Para empezar, en los 80 yo estuve trabajando en la UA haciendo la tesis cuando el departamento de neuroquímica estaba todavía por desarrollar. En aquel momento estaba también estaba ahí microbiología y todos conocéis a Francis Mojica. De estos grupos han salido muchísimas cosas y siguen saliendo. Además, posteriormente, cuando volví de Estados Unidos me ubiqué en la Universidad de las Islas Baleares y cuando necesitamos una empresa para sintetizar las moléculas de nuestro proyecto encontramos a Medalchemy, que es una spin-off de la UA, y tenemos una estrecha relación con ella.
P: ¿Qué es LAM 561?
Pablo Escrivá: Es una molécula de síntesis, es un lípido que está en la naturaleza, pero que sintetizamos aquí en colaboración con Medalchemy. Se trata de una molécula muy sencilla que no tiene prácticamente efectos adversos en dosis terapéuticas y que tiene un perfil farmacológico muy interesante. Ahora estamos finalizando los estudios clínicos y ha funcionado muy bien para diferentes tipos de cáncer. Ahora mismo vamos a terminar el desarrollo para tratar un tipo de cáncer mortal que es el glioblastoma, que afecta al cerebro, y cuyos pacientes tienen una esperanza de vida de poco más de un año. Nuestro objetivo es cambiar las reglas del juego, no solo por el beneficio terapéutico que pueda producir, sino por la ausencia de los efectos adversos típicos de la quimioterapia.
Nos han concedido ya la designación de medicamento huérfano en Europa y en Estados Unidos nos han tenido una alfombra roja para que esta medicina llegue cuanto antes a los pacientes, por lo que esperamos muy pronto poder ayudar a muchas personas a curarse o a aumentar su esperanza y calidad de vida.
P: ¿En qué fase se encuentra este proyecto?
Pablo Escrivá: Precisamente, nuestro objetivo con el evento organizado en el Parque Científico es difundir en qué fase se encuentra el proyecto. El desarrollo de un medicamento puede durar más de una década, nosotros estamos ahora aproximadamente a un año vista de que nuestro medicamento sea aprobado y comercializado en la Unión Europea, en Estados Unidos tampoco estamos muy lejos. Después de tantos años de lucha, por fin vamos a poder poner esto a disposición de los pacientes y a nuestros inversores que han apostado tanto les vamos a compensar.
P: ¿Qué infraestructura va a desarrollar en el PCA?
Pablo Escrivá: Actualmente estamos utilizando ya las infraestructuras de Medalchemy, que es la empresa que nos está produciendo el medicamento. Lo que queremos hacer aquí es trabajar en una planta que hemos licitado y vamos a empezar a equipar y que nos va a servir para dos cosas. Por un lado, para producir nuevos productos de investigación, nuevas moléculas que ya se están investigando. Por otro lado, para desarrollar los métodos de síntesis desde cero para nuevas moléculas que hemos diseñado y todavía no hemos probado. Y además, aumentar la capacidad de producción durante los primeros meses de entrada en el mercado para proveer a los pacientes hasta que una gran farmacéutica se haga cargo.
P: ¿En qué otros proyectos trabaja la empresa?
Pablo Escrivá: Tenemos un portafolio de productos muy ilusionante. El hecho de tener una tecnología totalmente novedosa que nos permite diseñar moléculas que pueden convertirse en medicamentos muy activos y con pocos efectos adversos. Estamos ya trabajando en diferentes productos oncológicos, uno de ellos es para el tratamiento de cáncer pancreático y otro para pacientes con lesión medular. Además, tenemos un proyecto centrado en Alzheimer, Parkinson y neurodegeneración en personas con Síndrome de Down.
P: ¿En qué momento se encuentra la biotecnología en la provincia de Alicante?
Pablo Escrivá: El sector biotecnológico en Alicante está creciendo muy bien, en general en España está funcionando bastante bien, básicamente porque antes no existía ese apoyo que requiere la biotecnología, que es un sector de largo recorrido, en el que no puedes facturar de hoy para mañana pero que los retornos al final son muy altos, más que en otros sectores. Aquí el apoyo recibido es el adecuado para poder lanzar adelante este tipo de proyectos biotecnológicos y una cuestión muy importante es que las personas que los impulsan tienen una gran formación. Esto es lo que hace falta, que haya muchísimo conocimiento y luego un apoyo institucional, cuando ambas cosas se unen es innegable que va a haber un boom en el sector.